A mitad del segundo trimestre, les hice a mis alumnos una encuesta de la que podéis ver un ejemplo. Llevo haciendo más o menos la misma encuesta, con algunos cambios, desde que empecé a trabajar, aunque al principio la hacía en papel y me daba mucha pereza calcular las estadísticas. Las encuestas online, como ésta de Google, lo ponen más fácil.
Este año, como estoy utilizando un método para dar clase ligeramente diferente, estaba más interesada en ver los resultados. Estas son algunas de mis conclusiones:
Puntos fuertes:
- La inmensa mayoría está razonablemente contenta, y son corteses y educados. De 96 encuestas, sólo hubo tres con insultos. Además, hubo 4 “muy mal” y 7 “regular” a la pregunta de control (una pregunta sobre un dato objetivo para comprobar hasta qué punto se dejan llevar por la antipatía).
- Su percepción subjetiva es que en clase, hablo en inglés la mayor parte del tiempo. A mí me parece que no. Hay un grupo, 2D, que está más conmigo, que pienso que hablo en inglés más o menos la mitad del tiempo total de clase.
- Por primera vez desde que hago esta encuesta, hay acuerdo positivo en la pregunta “preparo para usar inglés en el futuro”.
- Los más pequeños se divierten, los más mayores menos.
- Hay unanimidad en que les escucho y les ayudaría si tuvieran un problema. Parece que hago bien de tutora.
- Los resultados son dramáticamente mejores que el año pasado, algo notable teniendo en cuenta que la mitad de los alumnos son los mismos. O ellos o yo hemos cambiado mucho.
Puntos débiles:
- En general, creen que no me entienden cuando hablo en inglés.
- A pesar de mi insistencia en el tema, dicen que no les enseño técnicas de estudio. Puede ser porque este año he introducido tantas novedades, que se han liado, o que no le ven el lado práctico a algunas de ellas, como tener un cuaderno de apuntes pasado a limpio.
- Dos grupos creen que hay algo de manías, favoritismo, trato desigual… Casualmente son los grupos más revoltosos. Los otros tres grupos piensan que soy justa.
Tareas de clase que quieren hacer más:
- Trabajar por parejas, algo que no hacemos casi nunca.
- Sorprendentemente, deberes. Yo no pongo deberes, aunque tienen que hacer al menos tres tareas en casa por trimestre (mínimo de dos redacciones y pasar a limpio el cuaderno de apuntes). En el segundo trimestre, muchas semanas (no todas) les recomendé qué tenían que estudiar o trabajar en casa esa semana. Se ve que no ha sido suficiente y que no están preparados para trabajar desde casa de una manera tan independiente. Seguiré sin poner deberes obligatorios, pero les recordaré más veces cuáles son los deberes recomendados.
- Menos los más pequeños, que escuchan una canción al día y ven 40 minutos de una película en versión original una vez a la semana, todos los demás grupos quieren más ejercicios de comprensión auditiva, sobre todo si los hacemos con canciones.
- Menos los de 1º, que quizá no se dan cuenta de su importancia, todos quieren hacer más trabajo de comprensión lectora. Esto me sorprende un poco en el caso de los de 4º porque creía haberle dedicado suficiente tiempo, sobre todo en el primer trimestre.
- Los grupos, a pesar de ser muy diferentes, son homogéneos en su percepción de sus necesidades. Hay una sola actividad que nombra un solo grupo: todas las demás las nombran cuatro, o los cinco grupos.
Actividades que desean que hagamos menos:
- Trabajar gramática. Aquí sin sorpresas. Yo también querría trabajarla menos… lo que pasa es que cuando algo interrumpe las clases, lo que menos sacrifico es esto. Por eso parece demasiado: porque al final le dedico bastante más de lo que estaba en mis planes.
- Tres clases quieren menos trabajo por equipos (ahora mismo, una hora semanal).
Con el vocabulario, los trabajos escritos, y hablar en inglés ellos creen que hacemos lo suficiente. A mí me parece que en inglés no hablan bastante, pero bueno….
Por último, los más pequeños creen que este año están aprendiendo más y los dos grupos de 4º creen que aprenden al mismo ritmo del año pasado. Sus notas en general han bajado.
Resumiendo: el sistema hay que pulirlo, pero las clases están muchísimo más contentas que si estuviéramos simplemente siguiendo el libro. Continuaremos así, por lo tanto.