Una de las críticas más frecuentes que se pueden oír acerca del comunismo es que tal o cual persona comunista vive con comodidades y lujos consumistas, como pueda ser un iPhone, una vivienda cara o unas vacaciones. Esto sólo demuestra en los críticos un completo desconocimiento de qué es el comunismo y para qué sirve. El comunismo no se puede entender como una crítica a las posesiones individuales o al consumismo, sino al origen de la riqueza.
Para las personas que no saben nada de economía todos los bienes parecen iguales, pero es muy importante distinguir entre los medios de producción (los bienes que te permiten producir más cosas) y todos los demás. Medios de producción serían, por ejemplo: una finca, una explotación agrícola, una fábrica, e incluso una cantidad de dinero lo bastante grande como para hacer negocios con ella, es decir el dinero puede ser o no ser medio de producción, según se mire (para ser un medio de producción necesitarías tener mucho). ¿Y la producción de servicios, por ejemplo una tienda o una clínica? Vamos a considerar que sí son medios de producción, porque producen riqueza.
Ahora veamos de dónde sacamos el dinero. Lo obtenemos trabajando, con nuestro salario, o con nuestras obras si somos autónomos. Y lo obtenemos mediante el trabajo de los demás, si somos empresarios, o jefes. Sí, el dueño de una fábrica, una tienda o una explotación agrícola trabaja en el sentido de que se levanta temprano para supervisar, e incluso hace el mismo trabajo objetivo que sus empleados, pero la realidad es que además saca un beneficio del trabajo que han hecho otros. Eso se llama plusvalía.
También podemos obtener dinero de las rentas: tenemos una propiedad y la alquilamos. O especulando: tenemos unos bienes N y hacemos maniobras que no producen nada para que su valor aumente. Simplificando mucho son posiciones equiparables a las del empresario: obtienes beneficios personales sin estar produciendo nada para la sociedad, y quizá dañando a los demás.
Ahora volvamos a nuestro hipotético comunista con iPhone. Supongamos un mecánico que trabaja para en un taller. Como tiene mucha cualificación, está muy especializado y es de mucha antigúedad en la empresa, vamos, por lo que sea, gana muchísimo dinero, y se lo gasta en lo que le parece. Y dice que es comunista. ¿Lo que hace es hipócrita? No. Su sueldo se lo ha ganado legítimamente y si se compra un iPhone o una casa en la playa, no está explotando a otros. Él es un empleado de una empresa privada. Gana dinero, pero el taller mecánico técnicamente lo está explotando (el dueño del taller gana dinero cómodamente con el trabajo de nuestro mecánico). Su posición legal y económica es la misma que la limpiadora de la misma empresa. ¿Es ético que se compre lo que le dé la gana? Pues podemos hablar de eso otro día, pero eso ya no sería hablar de comunismo.
Ahora nuestro mecánico se harta del taller y de su jefe y quiere poner uno propio. Piensa en trabajar con media docena de compañeros y una recepcionista. Aquí es donde sí podríamos decir que si monta una empresa, y los demás reciben un sueldo, eso sí sería hipócrita e incompatible con el comunismo, porque él sería un empresario más, obteniendo un beneficio de explotar a los demás trabajadores. Tiene varias opciones legales coherentes con ser comunista, pero montar una empresa y emplear a otros no es una de ellas. Podría montar una cooperativa, por ejemplo, incluso si vive en un país capitalista sería legal, o todos los trabajadores podrían ser socios de la empresa.
Este mecánico también estaría haciendo algo incoherente si invirtiese el dinero que ha obtenido trabajando en especular. Es decir, si comprara acciones para jugar en Bolsa, si comprara pisos para luego venderlos más caros, resumiendo: si realizara actividades económicas que producen beneficios sin trabajar o que consistan en la explotación de otros.
En dos palabras: el comunismo NO es el reparto de tus bienes de uso personal, ni la defensa del consumo ético, ni una crítica al consumismo, sino la propiedad pública de los medios de producción. Y la única manera de ser un comunista hipócrita es ser comunista y empresario.

3 comentarios sobre “Comunistas con iPhone (Comunismo para torpes)

  1. Como si quiere gastarse el dinero en el puticlub.
    Si en el puticlub, en Apple o en la empresa que sea que produce los bienes y servicios que adquieren se explota a los trabajadores, ya no es problema del mecánico como consumidor.

  2. En la frase «En un país capitalista, por ejemplo, todos los trabajadores del taller podrían ser socios, o montar una cooperativa.» Creo que querías decir «En un país comunista…». Por lo demás, muy bien explicado. Gracias

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