Pilar_Bernal_Maya_Periodista
Pilar Bernal se dedica a una profesión poco común: es asesora de compras. La conozco desde hace bastante tiempo, y me ha ayudado a resolver algunos de mis problemas con la ropa. En mi opinión, su trabajo visibiliza que escoger la ropa adecuada y crear una imagen es algo que a las mujeres normalmente se nos presupone, y que por lo tanto tiene poco valor.
¿En qué consiste tu trabajo como asesora de compras? Mi trabajo va desde acompañar al cliente a tiendas, enseñarles con qué colores se pueden sacar más partido o qué cortes y tendencias son los que sientan mejor a su morfología corporal. También hablamos de cortes de pelo o maquillajes, tratamientos cosméticos/corporales… todo lo que sirva para mejorar su imagen o ayudarles a proyectarla para cumplir el objetivo que tengan entre manos, ya sea personal o laboral por ejemplo.
¿La gente suele repetir? Sí. Hay quien tiene pánico a ir de comprar porque no tiene tiempo o ganas, pero cada cierto tiempo tiene que renovar su armario o comprar un look para una boda o evento concreto. Así que repiten, porque en una hora se van con su ropa y accesorios comprados, y con la seguridad de que van perfectos.
¿Qué tipo de asesoría te piden más: para una ocasión especial, qué colores les van, renovar el armario…..? Un poco de todo, aunque en principio la mayoría quiere saber qué colores y tendencias les sientan mejor. Otros vienen con la prisa de que tienen un evento en pocos días y no tienen nada que ponerse, así que nos vamos de tiendas.
¿El centro comercial y tú en tu promoción personal anunciáis el servicio como unisex? sí.
Aquí me dio por comprobarlo, y pienso que se podría hacer explícito. Una entrevista al gerente de Airesur, y la publicidad en Facebook del servicio, utilizan el genérico masculino o estrategias como «tod@s», pero no hay una política explícita de publicidad para hombres.
¿Quieren ellos lo mismo que las mujeres? No exactamente. Ellos quieren agradar a alguien en concreto: su jefe, la familia de la pareja, a la pareja, o se visten para encontrarla si es que no la tienen. En general, son más inseguros con su imagen que las mujeres.
¿Son el mismo tipo de persona? Es decir, ¿Clientes y clientas suelen tener la misma edad, el mismo estilo… o no? No, qué va. Son de muy diferentes edades, estilos y poder adquisitivo. La mayoría de los hombres son jóvenes (de 20 a 40 años); sin embargo, he tenido clientas desde los 10 años, que vienen a comprar con su madre, hasta los 70. Hay quien llega muy perdido, sin saber ni qué estilo tiene, y esperan que yo los oriente a encontrarlo y sentirse bien, más seguros.

¿Recurren a ti personas, hombres y mujeres, a los que les cuesta trabajo encontrar ropa? ¿Por qué? Sí. Desde la talla 34 hasta más de la 50. Bajitos (de metro y medio) y muy altos (más de 1.90 m) Eso también es importante a la hora de elegir ropa y zapatos. Hay quién está acomplejado por tener una talla pequeña y unos pies demasiado grandes, por ejemplo, quien cree que no puede llevar pitillos denim porque tiene una 48 y no va a encontrarlos. Mi trabajo también les da confianza y les disipa dudas y miedos que no les permiten encontrarse a gusto con su talla/morfología corporal.
Saco como conclusión poco sorprendente de la experiencia profesional de Pilar Bernal que los hombres se sitúan en los extremos. La mayoría de las mujeres no tenemos problema en pedir consejo, y estamos preocupadas por nuestro aspecto: una asesora de compras gratuita es un capricho razonable que nos facilita la vida. Los hombres en cambio no sólo están educados en que la coquetería es femenina y su ropa, sencilla, sino también en no pedir ayuda y consejo: ellos siempre son los expertos. Por eso, un hombre que vaya de tiendas con asesoría tiene que ser joven, coqueto, preocupado por su aspecto (interesante que se estén vistiendo para una persona concreta) y además, lo bastante inseguro como para no fiarse de su propio criterio.