El lunes más cercano al 15 de octubre, día de Teresa de Ávila, es el Día de las Escritoras, por una iniciativa de la Biblioteca Nacional. Me pregunto si también es el día de las escritoras que han dejado de escribir. Y es que es el día de muchos tipos de escritoras.
Día de las escritoras que no creen ser lo bastante buenas.
Día de las escritoras con tres manuscritos sin publicar.
Día de las escritoras de diarios en forma de notitas. Día de las escritoras de hilos de tuiter, de cuentos para sus hijos, de cartas, que no se consideran escritoras.
Día de las escritoras de un libro firmado por otro. Día de la publicación con seudónimo o con iniciales.
Día de las escritoras que escriben Juvenil porque «las mujeres no escriben fantasía ni ciencia ficción».
Día de las escritoras que escriben cuando el niño se ha dormido.
Día de la única escritora reconocida de su estilo, país o generación. Día de la Pitufina.
Día de «es demasiado personal», «es demasiado corto», «es demasiado pesado» «es demasiado específico» y «lo escribí hace demasiado tiempo».
Día de que el género literario que te interesa no sea ni prestigioso ni comercial. Y es cosa individual tuya, por supuesto.
Día de no conseguir publicar. Día de publicar y que no te hagan promoción. Día de que la editorial no te promocione y la crítica no te haga caso. Día de ser una adelantada a tu tiempo y de haber nacido una generación demasiado tarde.
Feliz día a todas.